Aeonium percarneum
Sempervivum percarneum R. P. Murray, Aeonium percarneum (R. P. Murray) Pitard & Proust var. guiaense Kunkel.
Planta crasa cuyo tamaño alcanza hasta más de 1 m de altura. Tronco corto y ramificado, algo leñoso pero quebradizo, gris-parduzco y con cicatrices de inserciones previas. En estado estéril con rosetas terminales que son glaucas, carnosas y bastante densas, que pueden alcanzar hasta más de 25 cm de diámetro. Siempreverde o con poca reducción foliar en el verano. Hojas gruesas, cuneado-espatuladas, hasta 10 (13) cm de largo, apiculadas y notablemente ciliadas; margen rojizo. Inflorescencia piramidal y vistosa, hasta 25 (30) cm de altura, con hojas decrecientes en tamaño. Flores regulares y rosadas. Semillas numerosas y muy pequeñas (Kunkel & Kunkel, 1978).
Arbusto vigoroso y erecto de hasta 1 m. Ramas gruesas, divaricadas, lisas. Hojas carnosas, de color verde glauco a morado, generalmente con un borde rojo con cilios fuertes, curvados hacia adelante. Tallo floral muy frondoso. Flores 9-partidas. Pétalos rosados o blancos con listas rosadas (Bramwell & Bramwell, 2001).
Nanofanerófito ramificado, de hasta 1,5 m de alto. Rosetas terminales de 8-20 cm de diametro. Hojas verde-oscuras, margen rojizo y ciliado, láminas glabras, obovadas a oblanceolado-espatuladas, de 4,5-10 cm de longitud. Tallo florifero corto, hojoso. Inflorescencia anchamente piramidal, puberulenta. Primordios florales ovoides, rosados. Flores 8-10-meras. Sépalos verdes de margen rojizo, lanceolados a triangulares, puberulentos. Pétalos blancos con líneas rosadas, lanceolados, glandular-puberulentos en el envés. Estambres de filamentos blanquecinos a rosados, glandularpuberulentos; anteras amarillas a blanquecinas. Escamas hipóginas verdosas, cuadradas. Carpelos rosado-blanquecinos, delgados, glabros (Carqué, et al. 1992).
Porte alto y robusto, de hasta 1 m de alto, ramificado; rosetas de 8-15 cm de diámetro. Hojas glaucas, a veces matizadas de rojizo, obovado-cuneadas, subsésiles, fuertemente acuminadas, de 7-9 x 2,5-4 cm, glabras; margen rojizo, cubierto de cilios de base gruesa. Inflorescencia cónica; pedúnculos y pedicelos pubescentes. Flores 9-10 partidas. Cáliz pubescente; segmentos triangulares, agudos. Pétalos blanco-rosados, lanceolados, agudos, puberulentos abaxialmente. Estambres puberulentos. Nectarios cuadrados, emarginados. Carpelos con cierta tonalidad rosada, glabros (Bañares, 2015).
Florece desde abril hasta mayo (junio), en épocas de primavera-verano. Fructifica de julio a septiembre. Se reproduce por semillas y gajos (Kunkel & Kunkel, 1978; Carqué, et al. 1992).
En la región norte y central de la isla de Gran Canaria, en laderas rocosas y escarpadas en zonas xerofíticas y forestales, también en muros, riscos y tejados, desde la costa al ámbito potencial del monteverde, desde los 150 hasta los 1500 (1600) m de altitud. Muy común localmente en zonas de la Cuesta de Silva, Bandama, Santa Brígida, etc. (Kunkel & Kunkel, 1978; Bramwell & Bramwell, 2011; Bañares, 2015).
La filogenia de Mort et al. (2007) con DNA nuclear (ITS) y tres regiones del ADN cloroplástico (incluyendo a matK) indica que A. simsii y A. undulatum se encuentran en un clado bien apoyado (con A. simsii en posición muy basal), mientras que A. percarneum se encuentra en posición totalmente derivada en otro clado. Estas evidencias llevan a considerar que A. simsii es con diferencia la especie más antigua de este grupo, seguida (a considerable distancia) de A. undulatum y luego de A. percarneum. El super-árbol obtenido con la secuencia de la región cloroplástica rbcL para este proyecto indica una separación de 10 pasos entre A. simsii y A. undulatum, lo cual refuerza la separación delatada por la filogenia de Mort et al. (2007). No obstante, A. percarneum ostenta según nuestros datos de la secuencia rbcL un número de mutaciones diferenciadoras de los otros dos congéneres (22 respecto de A. undulatum y 26 respecto de A. simsii) que es demasiado alto como para considerarla “reciente”. Este hecho, unido (1) a la gran incidencia de la hibridación en este género, y (2) a que las tres especies pertenecen a clados diferentes donde la mayoría de los congéneres no se hallan en el territorio de la Reserva de la Biosfera, nos hace considerar a esta especie como “dudosa” (Texto: Juli Caujapé Castells).
A las especies de Aeonium se le atribuyen numerosas propiedades medicinales, como curativo de heridas, desinfectante, analgésico y curativo de quemaduras, ya que sirve como antipirótica, para las heridas sufridas por el fuego, al poseer propiedades extraordinarias contra las quemaduras. También tiene propiedades como reductor de la fiebre, astringente y para la garganta y bronquitis, a veces se utiliza como antídoto del látex corrosivo de las Euphorbias. Se dice también que son antivirales y reducen alergias y otras inflamaciones. Internamente se usa principalmente en forma de infusión o como jugo diluído de las hojas, o también las hojas molidas se aplican directamente como cataplasma (Jaén Otero, 1999; Bramwell, 2004).
Es un buen elemento para jardinería, al ser una especie ramificada que suele alcanzar grandes portes, resistiendo variados ambientes (Bañares, 2015).
Dioscórides en la antigua Grecia dio este nombre a una planta crasa, del griego aionium=siempre viva o de aiion=eternidad, posteriormente adaptado para el sinónimo Sempervivum, género del que Webb & Berthelot segregaron Aeonium. La etimología de la especie proviene del latín (per=completo o muy, y carnus=carne), aludiendo al color rojo de las flores de esta especie (Kunkel, 1986).
- Bañares, Á. (2015). Las plantas suculentas (Crassulaceae) endémicas de las Islas Canarias. Publicaciones Turquesa, Santa Cruz de Tenerife. 122 pp.
- Bramwell, D. (2004). Plantas medicinales de las Islas Canarias. Edit. Rueda. Madrid. 152 pp.
- Bramwell, D. & Bramwell, Z. (2001). Flores silvestres de las Islas Canarias. Área de Recursos Hídricos y Medio Ambiente. Cabildo Insular de Gran Canaria. Madrid. 437 pp.
- Carqué, E., Wildpret, W., del Arco, M. & León, M.C. (1992). Crasuláceas endémicas de Canarias. Viceconsejería de Medio Ambiente. Gobierno de Canarias. Estudio no publicado.
- Jaén Otero, J. (1999). Manual de medicina popular canaria. Los secretos de nuestros viejos yerberos. (6ª ed.). Centro de la Cultura Popular Canaria. Tenerife. 133 pp.
- Kunkel, G. (1986). Diccionario botánico canario: Manual etimológico. Edit. Edirca. Las Palmas de Gran Canaria. 275 pp.
- Kunkel G. W. H. & Kunkel, M. A. (1978). Flora de Gran Canaria. Tomo III. Las Plantas Suculentas. Colección “Naturaleza Canaria”. Ediciones del Excmo. Cabildo Insular de Gran Canaria. Las Palmas. 121 pp.
- Mort, M. E., Soltis, D. E., Soltis, P. S., Santos-Guerra, A. & Francisco-Ortega, J. (2007) Physiological evolution and association between physiology and growth form in Aeonium (CRASSULACEAE). Taxon 56: 453–464.
Es una especie muy variable en cuanto a su tamaño y forma de sus hojas. Una forma pequeña del norte (Montaña Alta de Guía) ha sido descrita como var. guiaense Kunkel. Las plantas del barranco de Guayadeque suelen ser mayores en tamaño, con hojas oblanceolado-espatuladas, y son más exuberante en floración (Kunkel & Kunkel, 1978).
La especie se hibrida con Aeonium undulatum, A. simsii y A. virgineum (Kunkel & Kunkel, 1978).
► Documentación, contenidos y Edición: Inmaculada Guillermes Vázquez.
Aeonium percarneum
Nombre común: Puntera, bejeque, bejeque rosado.
Familia: CRASSULACEAE
Distribución: C
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